Un hogar nuevo
El Acuario Nacional, en Baltimore, Maryland, es hogar de casi 20,000 animales. Entre ellos hay siete delfines nariz de botella: Jade, Spirit, Maya, Bayley, Chesapeake, Beau y Foster. Bayley, el más joven, tiene 9 años. Chesapeake, el mayor, tiene 26 años. Es la mamá de Bayley. Todos los siete nacieron en cautiverio. Ninguno ha conocido la vida en la naturaleza.
Pero pronto, esta colonia de delfines tendrá una mudanza grande. El Acuario Nacional dice que cerrará su exhibición Dolphin Discovery para 2021 y transferirá a los animales a un santuario más parecido a su hábitat natural. Será el primer santuario para animales marinos en Estados Unidos. “Realmente estamos creando un modelo nuevo para que interactúen los humanos y los delfines”, dijo Leigh Clayton a TFK. Es la directora de salud y bienestar de animales del Acuario Nacional.
RICHARD T. NOWITZ—GETTY IMAGESUna comprensión mejor
En los últimos 15 años, los científicos han aprendido mucho sobre los delfines. La tecnología nueva, como los drones y las etiquetas de GPS durables, ha permitido a los científicos dar seguimiento a los delfines salvajes. La tecnología reveló qué activos realmente son los animales mientras están en la naturaleza. En el océano, los delfines se sumergen cientos de pies y viajan hasta 100 millas por día. Usan ecolocalización, o sonidos reflejados, para explorar. Interactúan con otros animales. Los delfines no pueden hacer estas cosas en acuarios.
“Aun si eres el entrenador más bueno en el mundo y amas a tus animales, si los colocas en tanques vacíos, se parecerán una persona que se la pasa sentada mirando televisión”, dijo Naomi Rose a TFK. Es una científica de mamíferos marinos en el Instituto de Bienestar Animal en Washington, D.C. “No harán el ejercicio que necesitan para estar saludables. Se van a aburrir”.
STUART WESTMORLAND—GETTY IMAGESAl 31 de enero, había aproximadamente 616 ballenas y delfines cautivos en EE.UU. y Canadá, según una base de datos llamada Cetabase. Manifestantes han demandado que los acuarios, incluyendo el Acuario Nacional, los liberen.
Pero a diferencia de algunos animales, los delfines nacidos en cautiverio no pueden simplemente ser liberados a la naturaleza. Nacieron sin los instintos que les dicen cómo sobrevivir ahí. Sus madres les enseñan qué comer, cómo cazar y cómo permanecer seguros. Los humanos no pueden recrear esas lecciones. “Nosotros no sabemos cómo enseñarles a ser delfines salvajes”, dice Rose.
© 2017 NATIONAL AQUARIUMPrimero los delfines
El Acuario Nacional todavía no ha decidido dónde estará su santuario de delfines. Pero su búsqueda está guiada por una filosofía de poner a los delfines en primer lugar. Los delfines nariz de botella viven en aguas templadas o tropicales. Por esta razón, el santuario estará ubicado probablemente en la costa de Florida, en el Océano Atlántico o El Caribe. Los delfines podrán nadar en un área mucho más grande y profunda que la piscina en Baltimore. Estará separada del mar abierto por una jaula o barrera natural. Pero seguirá conectada al mar y estará llena de plantas marinas y otros animales.
“Es más interesante que un tanque de cemento”, dijo Lori Marino a TFK. Ella comenzó el Centro Kimmela para Defensoría de Animales, pero no está involucrada con el santuario. “Sigue siendo cautiverio, pero pueden realmente tener una vida ahí”, dice. Los entrenadores seguirán cuidando a los delfines. Los visitantes pueden aun verlos, pero solo a la distancia.
Los entrenadores en Baltimore están preparando a los delfines para el cambio. Los entrenadores usan gafas de sol en interiores para que los delfines no se confundan cuando vean personas usándolas en el santuario. Para prepararlos a ver aves, los entrenadores balancearán algo sobre la piscina que Leigh Clayton dice que “se parece a un gato grande de juguete”. Eventualmente, se agregarán al tanque de los delfines algas y otras sustancias naturales. Y un día muy pronto, Jade, Spirit, Maya, Bayley, Chesapeake, Beau y Foster sentirán agua marina por primera vez.